Tres trucos para tener Internet gratis en la casa
El uso de Internet en el hogar se ha convertido en parte integral de la vida cotidiana para millones de personas en todo el mundo. La conectividad digital ha transformado la forma en que las personas viven, trabajan, se educan, entretienen y comunican.
Desde las tareas más simples hasta las actividades más complejas, internet se ha convertido en una herramienta imprescindible que ha revolucionado la sociedad y la forma en que interactuamos con el mundo que nos rodea.
En la actualidad, el Internet en casa es utilizado para una amplia variedad de propósitos. Una de las principales ventajas es el acceso a información instantánea. Ya no es necesario acudir a bibliotecas o esperar a que llegue el periódico para obtener noticias e información actualizada; ahora, las personas pueden acceder a una cantidad ilimitada de datos con solo un par de clics. Esto facilita la investigación, el aprendizaje y la toma de decisiones informadas.
Así las cosas, para las personas que necesitan internet en su casa, pero no tienen, no cuentan con un plan y deben conectarse a una red wifi, existen tres trucos que sirven para tener Internet gratis en el hogar sin pagar y así conseguir estar en línea todo el tiempo, de una forma fácil y rápida.
Wifi Warden
Esta es una herramienta en la que los usuarios comparten contraseñas wifi para que la comunidad pueda conectarse de forma gratuita, una buena opción de tener wifi gratis.
Wifi Warden también ofrece otras funciones útiles, como la visualización de la información detallada sobre la red wifi a la que se está conectado, incluyendo la dirección IP, la dirección MAC
Wifi Master
Esta aplicación ayuda a las personas a buscar los puntos de conexión gratuitos más cercanos, además de que informa qué tan buena velocidad de internet tiene cada uno de ellos.
Internet gratis de la CFE
Esta opción funciona para las personas que viven en México, puesto que la Comisión Federal de Electricidad lanzó un chip que les permite a los usuarios tener internet gratis en el celular. Si bien adquirir el chip no tiene precio, la persona debe hacer “recargas” dependiendo del uso que le va a dar.