Desinstala este archivo de tu computadora y nunca más estará lenta
Por el trabajo continuo al que está sometida una computadora portátil o de escritorio a diario es común que comience a funcionar de forma incorrecta, con varios errores que presenta, como problemas al iniciar sesión o que algunos programas se demoren en cargar.
Para ordenadores con Windows 11, el sistema operativo más reciente de Microsoft, hay un truco sencillo que puede aumentar su velocidad y rendimiento sin recurrir a aplicaciones terceras o pagos adicionales.
Con solo eliminar la carpeta Prefetch es posible evitar que se acumulen archivos innecesarios en la computadora, y seguir utilizándose de forma rutinaria sin que vuelva a presentar problemas de rendimiento.
La carpeta Prefetch, ubicada en el directorio C:\Windows\Prefetch, es un componente diseñado originalmente para acelerar el funcionamiento del sistema. Su propósito principal es almacenar archivos temporales que contienen información sobre los programas que utilizas con mayor frecuencia.
La idea detrás de este mecanismo es optimizar el rendimiento al permitir que el sistema prediga qué programas se abrirán y, por lo tanto, cargue más rápido las aplicaciones que el usuario suele utilizar.
En teoría, este proceso de anticipación debería mejorar la eficiencia del equipo, reduciendo el tiempo de espera cada vez que se abre un programa.
Sin embargo, con el tiempo, la carpeta Prefetch puede llenarse de archivos que ya no son necesarios o están obsoletos. Esto, en lugar de agilizar el rendimiento, puede tener el efecto contrario, ralentizando el sistema.
A medida que la carpeta Prefetch se llena de archivos innecesarios, el sistema operativo sigue cargando estos datos cada vez que enciendes la computadora o abres una aplicación, lo que genera un desgaste innecesario de los recursos.
Este exceso de archivos temporales puede provocar varios problemas, como la apertura lenta de programas, cierres inesperados de aplicaciones y, en general, una experiencia más lenta e inestable.
Estos síntomas no solo frustran a los usuarios, sino que también pueden afectar negativamente la productividad, especialmente si se usa la computadora para trabajar, estudiar o realizar otras tareas cotidianas que requieren un rendimiento ágil.
Muchos usuarios, al enfrentarse a este tipo de problemas, recurren a software externo para optimizar el sistema. Sin embargo, estas soluciones requieren una inversión adicional y no siempre ofrecen los resultados esperados. Afortunadamente, existe una solución gratuita y accesible que no requiere la instalación de ningún programa adicional.
Eliminar la carpeta Prefetch es un proceso sencillo y seguro que puede realizar cualquier usuario de Windows 11, independientemente de su nivel de conocimientos técnicos.
El sistema operativo está diseñado para recrear automáticamente esta carpeta después de su eliminación, lo que significa que no se corre el riesgo de dañar el sistema. A continuación, se explica cómo hacerlo:
- Acceder al Explorador de archivos en tu computadora.
- Ir al disco C:, que es donde está instalado el sistema operativo.
- Dentro de la carpeta Windows, buscar y abrir la carpeta llamada “Prefetch”. Aquí está una lista de archivos con la extensión .pf.
- Seleccionar todos los archivos dentro de la carpeta presionar Ctrl + A para seleccionarlos todos) y luego borrarlos. Presionar la tecla “Supr” o haciendo clic derecho y seleccionando “Eliminar”.
- Una vez eliminados los archivos, reiniciar la computadora. Windows 11 recreará automáticamente la carpeta Prefetch y generará nuevos archivos basados en los programas que se usen a partir de ese momento.
Para quienes no han realizado una limpieza de la carpeta Prefetch en mucho tiempo, esta sencilla acción puede generar mejoras inmediatas en el rendimiento del sistema. Los usuarios suelen notar una apertura más rápida de aplicaciones, una reducción en los tiempos de carga y en general, un sistema operativo más ágil.
Además, eliminar la carpeta Prefetch puede contribuir a una mayor estabilidad del equipo, disminuyendo la frecuencia de errores, y cierres inesperados de aplicaciones que suelen estar relacionados con la acumulación de archivos obsoletos.
Otro punto a destacar es que este procedimiento no requiere ningún tipo de inversión o la instalación de software adicional, lo que lo convierte en una opción accesible y sin riesgos para cualquier usuario.